A la hora de trabajar por rincones he puesto en marcha un rincón llamado "El rotulador mágico". Consiste en una colección de fichas con el nombre de los niños, grafomotricidad, laberintos, completar figuras, etc. Se meten dentro de una funda de plástico o encaduernador y los niños las completan con rotuladores especiales para pizarra blanca. Tienes la ventaja de que se puede borrar muy facilmente, solo necesitas un trozo de papel. Como les cuesta mucho controlar el trazo agradecen que se pueda borrar tan facilmente y que no deje ratros; además pintar con rotulador es muy motivador para ellos y aún más si es "mágico".
La actividad ha sido acogida con gran aceptación y consigo trabajar la grafomotricidad de una forma lúdica. Es un buen método sobretodo para los niños que muestran más dificultades en este aspecto. Suelo trabajar en grupos de 5 niños para poder controlar y ayudar en las dificultades que aparecen (coger el lápiz, direccionalidad...) Además una vez que las utilizas se pueden exponer en la clase durante un tiempo y aunque el rotulador se seque se puede borrar con una toallita húmeda, y la tienes como nueva para vovler a empezar y así evitas tener que hacer tantas fotocopias. Espero que os guste la idea y que la podais aplicar!
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